10 de febrero de 2010

Reseña: Juego de tronos, de George R. R. Martin

La primera vez que me hablaron de Juego de Tronos y la saga Canción de Hielo y Fuego pensé que se trataba del típico libro de fantasía épica moderna, de esos que se pueden englobar en la frase “una vez leído uno, leídos todos”. No podía estar más equivocado.

En Juego de Tronos se nos plantea un mundo inventado, con su mapita en las primeras páginas y todo, con muchos nombres raros y ciudades extrañas. También te provoca una sensación de confusión al principio del libro, al hablar de las ciudades y personajes como si los conociéramos de primera mano; denominador común, junto con el mapa y los nombres impronunciables, de los libros de fantasía. Pero ahí acaba todo parecido con el resto.

Al contrario de lo que muchos se puedan esperar de esta saga (yo entre ellos) no es un relato de héroes humanos que se alían con elfos y enanos para acabar con orcos, si no un complejo entramado de distintos personajes inmersos en una red de conspiraciones, intrigas y traiciones que dejan incluso al más pintado con la boca abierta. El mundo creado por George R.R. Martin incluye algunas cosas de fantasía, como estaciones que duran años o unas escalofriantes criaturas medio muertas, pero su impacto en este primer libro es poco trascendente. Por lo demás, la historia es tan realista que podría haber tenido lugar perfectamente en la Edad Media. De hecho, el autor es un estudioso de la Edad Media europea, y ha reconocido múltiples similitudes y parecidos con algunos episodios del Reino de Inglaterra en esa etapa.

El hilado de personajes y el desarrollo de cada uno están tratados de una manera ejemplar. A eso hay que juntarle la variedad de los mismos, hecho que provoca que siempre que te encuentras con alguien que también ha leído la novela te hagan la inevitable pregunta de “¿y cuál es tu personaje favorito?”.

La traducción es de buena calidad, no se ven muchos fallos o expresiones que te pongan los pelos de punta, y la prosa es fácil de seguir.

Las dos cosas peores de este libro son que se trata de una saga de siete tomos y de momento sólo tenemos hasta el cuarto, y que cada ejemplar pesa una tonelada. Pero bueno, para eso último han sacado una versión de bolsillo dividida en dos tomitos.

En resumen, Juego de Tronos es una novela indispensable para cualquiera que le guste el género épico, medieval, de intrigas o de guerra. Y para los que no, también.