Reseña: Danza de dragones (Canción de hielo y fuego, 5), de George R.R. Martin. ¿Cómo que el peor?

Después de las críticas he reunido valor para coger el quinto libro de la saga y llamadme rara —¡Rara!—, pero a mí me ha encantado. Aquí todo converge al otro lado del mar Angosto, por fin, no está Daenerys sola guerreando, todo confluye y nos promete ser épico.

Esto demuestra que no me tengo que fiar de nadie, pero de nadie, ni el más fiel amigo con gustos más afines. Da igual, este libro no es el peor de la saga, no es un rollo, es más y mejor si lo comparamos con Festín de Cuervos, y lo mejor es que es un perfecto preámbulo para lo que está por venir.

Si en el cuarto nos encontrábamos en el sur, conociendo a las serpientes de arena, con Brienne, Sansa, Desembarco del Rey, Sam… Aquí volvemos al norte, con nuestro querido Jon y el detestado Lord Ramsay. Recuperamos los capítulos de Daenerys, Tyrion y conocemos personajes que no habían tenido voz, como Ser Barristan Selmy o el príncipe Quentyn de Dorne.

Entiendo que se pueda hacer pesado el principio, porque recuerdo que retrocedemos en el tiempo, hasta donde nos dejó el tercero, después de… ya sabéis. A mí también se me hizo cuesta arriba, pero allá por la página doscientos y algo, donde se pone a la altura y empieza a avanzar… Ya no lo puedes dejar.

Una de las cosas que más me ha gustado de este libro es que es donde los personajes más se están juntando y confluyendo sus propósitos, desde el entrañable primer libro, claro. Este quinto libro se puede dividir en dos perfectamente: lo que pasa al otro lado del mar angosto, y lo que pasa en el Muro y en Invernalia. Se produce un giro de tuerca y donde antes nos encontrábamos capítulos de rellenos sin peso narrativo (sí, todos los de Daenerys hasta la fecha), ahora es al revés. Los capítulos de Daenerys es donde pasan cosas, más allá de la diplomacia y las intrigas.

Un amigo me decía que en los capítulos de Jon, de este libro, éste se iba convirtiendo en Eddard y que le auguraba un final horrible por ser tan honrado e intentar hacer las cosas tan bien. En parte sí que es así, pero ya lo sabíamos, Jon es bueno, Jon es Lord Comandante y el guardián del muro, es la espada en la oscuridad y… Bueno ya. Pero sus conversaciones con Melisandre no son nada desdeñables y espero que esa buena relación sirva para algo (ya sabéis de lo que hablo).

También me han gustado muchos los capítulos de Theon, porque el desalmado Lord Ramsay me encanta y espero que muera de la manera más absurda posible. ¿Os acordáis de Viserys? Pues de ese estilo.

Quiero pensar que hay personajes que no pueden morir por todo lo que les putea, esta sección estaría encabezada por Tyrion. Que empieza viajando en litera y “conspirando”, para luego acabar siendo mercenario —por no hacer más spoilers—, pero su personaje es uno de los que más vueltas está dando, y siempre que viene un capítulo suyo es: “bieeeen”.

Tengo que decir algo negativo. Hay capítulos que si no dice polla seis veces en la misma página no lo dice ninguna. O cuando Daenerys y Daario se acuestan, este hombre no maneja en absoluto la narración erótica y corta todo el rollo, coloquialmente hablando. Nadie es perfecto.

En general, creo que este libro está mejor concebido que el cuarto. Acaba muy arriba y tiene una estructura narrativa más que decente. Por si no teníamos bastante nos deja con la miel en los labios con capítulos como los de Jaime o el de Doran Martell, además de lo que está sucediendo te deja con una sensación de: “la que se va a liar”. Y qué puedo decir del epílogo, Varys siempre sorprende.

Como lectora esta saga me está aportando mucho, literariamente hablando. Porque me acuerdo que cuando empecé Juego de Tronos, me costaba Dios y ayuda terminarme un capítulo, por el lenguaje, por la forma de escribir… Y ahora los devoro. No es sólo una saga de intrigas, es fantasía y son todos los personajes. Pero, sobre todo, es la incertidumbre y el miedo a que George R.R. Martin se le vaya la cabeza y siga haciendo lo que le sale de la punta de la nariz. Recomendable a todo el mundo, hay que perder el miedo a esta saga.